Esta receta la recuerdo desde muy niña, la preparaba mi madre en muchas ocasiones, sobre todo cuando salíamos de excursión. La podemos comer recién hecha, pero creo que sabe mejor cuando la preparamos con antelación.
INGREDIENTES:
1 Conejo
1 cebolla
1 cabeza de ajos
6 champiñones medianos
1 vasito de vino de jerez seco
1 cucharadita de harina
20-25 aceitunas
1 rama de tomillo
1 hoja de laurel
Aceite de oliva, sal, pimienta y perejil
En una cazuela poner aceite y sofreír un trozo del hígado del conejo con un poco de sal, retirar y reservar.
En el mismo aceite dorar la cabeza de ajos, añadir la cebolla cortada en juliana y un poco de sal, cuando empiece a estar transparente incorporar el conejo troceado y salpimentado, para que se vaya sellando la carne. Cuando tenga color poner una hoja de laurel, la harina y rehogar todo bien.
Añadir el vino de jerez, dejar hervir un poco para que se evapore el alcohol, poner la rama de tomillo y cubrir el conejo con agua templada. Tapar la cazuela y dejar cocer a fuego medio durante 35 minutos.
A continuación trocear los champiñones e incorporarlos. Cocinar 15 minutos y añadir las aceitunas. Mantener en el fuego 10 minutos más. Pasar por un pasapurés el trozo de hígado con una rama de perejil y un poquito de agua e incorporarlo a la cazuela, esto hará que la salsa espese. Esperar 2 minutos para que se mezclen los sabores y servir.
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